Cómo usar aceite de ricino para equilibrar el sistema nervioso

¿Sabías que podés relajar tu sistema nervioso de forma natural antes de dormir usando solo aceite de ricino?
En este artículo te cuento cómo aplicarlo y por qué puede ser una herramienta poderosa para tu salud hormonal y energética.

✨ ¿Qué es el aceite de ricino y por qué puede ayudarte?

El aceite de ricino es una medicina ancestral usada por generaciones para desinflamar, limpiar órganos y armonizar el sistema nervioso. Aunque muchas lo conocen por sus efectos sobre la piel o los dolores menstruales, también tiene una acción profunda sobre el sistema nervioso central cuando se aplica en puntos estratégicos del cuerpo.

Pronto vas a poder ver una sección de videos en el blog donde otros profesionales explican sus propiedades con más detalle. Y si te interesa saber cómo usarlo para dolores menstruales, ya tenés ese artículo publicado también. 😉

🌌 Ritual nocturno: cómo aplicarlo para calmar tu sistema nervioso

Paso a paso simple, natural y efectivo:

  1. Elegí un aceite de ricino de buena calidad (prensado en frío, orgánico, sin aditivos).

  2. Antes de dormir, aplicá una pequeña cantidad en:

    • 👉 El ombligo (puerta de entrada al sistema digestivo y emocional)

    • 👣 Las plantas de los pies (reflejos nerviosos y puntos de drenaje)

    • 🤲 Las axilas (zona linfática y reguladora del calor corporal)

  3. Masajeá suavemente hasta que se absorba parcialmente.

  4. Dormí sin enjuagar. Durante la noche, el aceite penetrará en tu piel y comenzará su acción calmante.

Podés repetir este ritual durante varios días seguidos, especialmente en momentos de estrés, insomnio o ansiedad.

💫 ¿Qué beneficios podés esperar?

  • Mayor calma interna y sensación de arraigo

  • Mejora del sueño profundo y la recuperación nocturna

  • Relajación del sistema nervioso simpático

  • Apoyo al sistema hormonal y a la respuesta del eje HHA (hipotálamo-hipófisis-adrenales)

  • Sensación de presencia corporal y descanso verdadero

🌀 Este simple gesto puede cambiar tu noche (y tu día)

Incorporar esta práctica en tu rutina nocturna es una forma amorosa y efectiva de decirle a tu cuerpo: “Estoy a salvo, podés soltar.”
Es una invitación a volver a tu centro, reconectar con tu sabiduría corporal y permitir que la medicina de la naturaleza te sostenga.

Ya me contarás cómo te fue con esta práctica 🌙

Anterior
Anterior

Disruptores Endocrinos: Lo que Sabotéa tu Salud Hormonal (y Cómo Recuperarla)

Siguiente
Siguiente

Sistema Nervioso y Ciclicidad Femenina: La Clave para Regular Tus Hormonas y Recuperar Tu Fertilidad Natural